El mercado de energías renovables sigue creciendo a tal ritmo, que plantea nuevos retos a los técnicos especializados en la puesta en marcha y el mantenimiento de plantas solares y eólicas del futuro. Mark Bakker, ingeniero de aplicaciones de campo de Fluke Corporation, analiza la importancia que tiene medir la calidad eléctrica en las energías renovables, especialmente en las instalaciones solares.
El crecimiento de las instalaciones de energía solar y eólica
Las ventajas de cambiar la generación de energía basada en combustibles fósiles por los recursos de energías renovables son innegables. En la última década ha habido un crecimiento significativo de la generación de energías renovables en toda Europa.
Solar Power Europe señaló en su reciente informe anual, que el número de instalaciones solares en Europa aumentó en un tercio durante 2021 hasta llegar a 26 gigavatios (GW). El crecimiento de la energía eólica en Europa supera de largo al de la solar y se estima que se incrementará hasta 105 GW durante los cinco próximos años según Wind Europe.
El probable motivo de este incremento es que los gobiernos de todo el mundo están potenciando sus medidas destinadas a reducir las emisiones de carbono, que se consideran en gran parte la causa del calentamiento global, y lograr cero emisiones netas. Desde el Acuerdo por el Clima alcanzado en el COP21 de París en 2015 se han aplicado muchas políticas, pero a la luz de nuevas pruebas aparecidas en los últimos años estas políticas se han reforzado aún más.
No solo el cambio en la política ha impulsado el auge de las energías renovables a escala global. Según el WE forum, el coste de la electricidad fotovoltaica cayó alrededor del 85% en la pasada década. El aumento del número de instalaciones solares sigue su curso en todo el mundo.
Cómo se capta la energía del sol
Hay formas de captar la energía térmica del sol para calentar agua de uso doméstico. También puede ser recogida mediante espejos para concentrar la energía del sol y calentar agua hasta las temperaturas necesarias para accionar turbinas de vapor. De lejos el método más extendido para recoger la energía del sol consiste en recurrir a paneles fotovoltaicos que transforman la energía de los fotones para chocar con los electrones de los átomos y generar una corriente electrica.
Este crecimiento dinámico de la energía fotovoltaica para producir electricidad está creando una demanda cada vez mayor de técnicos que pueden gestionar, mantener y resolver problemas en sistemas fotovoltaicos de manera eficiente y efectiva.
